miércoles, 14 de diciembre de 2011

Cada alba es otro amanecer.

que son las utopias, sino toda nuestra vida. Vivimos en un completo estado utópico, en el que intentamos conseguir lo que resulta inimaginable en un principio. Pero al final siempre te das cuenta de que lo que parecia tan irrealizable pasito a pasito se va acercando y acercando hasta que lo podemos tocar con los dedos. Sin embargo la vida siempre lleva su ritmo y acabas por despertarte y al alba ves que el horizonte sigue en su sitio y que todo sigue su ritmo sin importar tus pasos. Hay quien nada contra corriente y quien se cree que lo hace, pero la felicidad no se logra llegando donde sale el sol, se tiene al andar. Por eso deja que las olas del tiempo te arrastren y disfruta de la espuma.