jueves, 11 de abril de 2013

Trastornando un día

Y te encontré,
apareciste sin doblar ninguna esquina,
quizás ya estabas ahí y no podía verte,
quizás le de demasiadas vueltas.

Encontré tu refugio
entre tus palabras,
donde están las emociones
donde acaba un día duro
y empieza una noche de incertidumbre.

Yo tan yo,
sigo igual que siempre,
quizás menos invisible que ayer
o simplemente me tenga que dar cuenta
que por estar ciego no te haces invisible,

invisible para ti es el mundo...

Pero lo que no ves puedes oírlo
lo que no hueles puedes palparlo,
nunca será lo mismo,
quizás sea mejor
quizás me esté complicando.

Aún así ya no te olvido,
aún así has cambiado todo,
no se si seria tu intención
en verdad ni siquiera se quién eres,

pero se que no hace falta.

Y tu tan invisible y misteriosa llegaste a mis oídos
a través de mis ojos,
y la falta de cordura,
y la falta de intención,
el misterio,
no eres más que lo que yo cree en ti
para mi,

y me tengo que andar con ojo
y con tiento,
porque al final no vas a ser mas que una idea con voluntad propia,
capaz de cambiar a tu antojo
y derribar los palacios que ensalce sobre tus letras

letras sin nombre
sin sentido

pero con más poder del que me pienso.